viernes, 15 de enero de 2010

Fusión

Con pleno conocimiento de causa, fuimos juntando el cuerpo hasta terminar con la materia, quedamos sólo pensamiento. Tu y yo desdibujando, vibrando, y adiós al ego, y buenos días a la emoción, empatía, sanando. Yo tan tú, horas de silencio, mañana eterna, y luz, tu sonrisa se vuelve parte de mi repertorio, mi mano en tu pecho se expande interminablemente...

Sales de mi casa una nueva mujer, no serás nunca la misma.

Magia.

sábado, 9 de enero de 2010

Profeta

Dios está empapado entre murallas;
cálido, minimalista y curvo; placentero,
lo sé, lo veo y ante sus puertas:
cedo yelmo, cota, laptop y pistola.

¡Llora! Déjalo entrar, esculpir tus sueños,
y toda tú, fragata, papalote, pistón, cereza,
niebla . . . (es tan humano tiritar), tiembla,
masturba tus ansias, mujer ávida, consagrada.

Yo lo he visto infinitas veces, algunas formas, mil risos,
galaxias, negros agujeros, siempre divino misterio,
bajo llave, perdurando célibe de tacto, de sí dueño,
respuesta, pregunta secreta, password, hipervínculo roto.

Y es que pronto lo tendré frente a mí de nuevo,
preguntándome algo distinto, dictándome su evangelio,
ordenándome cuanto más debo subir y por donde. . .
Sabio y generoso, húmedo, oculto y voluble, me prefiere sin saberlo.

Tu sexo, mujer, es la divinidad que promulgo, la comunión que ratifico.

lunes, 4 de enero de 2010

La verdad

La verdad nunca es suficiente
cuando nació de una mentira,
es colibri secandose en el patio,
fantasma de una belleza ajena.







Prendedor caído,
tela hecha jirones,
luz que grita ofendida,
alarga sus brazos, se cuela por las ventanas,
reestrena los hábitos de la verdad.

Sin retribución, sólo efecto.

domingo, 3 de enero de 2010

Una mañana sincera

Esta es tu ventana.

Sin mantas, sin cobijas,
los brazos muertos, las piernas tendidas,
arqueada levemente la espalda
nuestros ojos encontrados

en el suelo recostados, desnudos ,
tirados con la frescura de la hierba
ventana abierta, viento de sol
calma obtenida al hacerte el amor

en una mañana como esta, sincera
caliento el agua y te bañas conmigo,
sales, te abrazo y te seco, tiritas. . .
desayunamos sandía, jugosa, goteante y roja

Sin mantas, sin cobijas
tus piernas en mis hombros
tus manos en mi espalda
yo, tan dentro de ti, tan dentro

arqueada,
mecemos al mundo
nuestros ojos entreverados,
en el suelo, desnudos, frescos, goteantes y rojos
cenit.

una mañana juntos, sinceros,
bañandonos en hierba de sol,
calma al hacerte el amor
desayunamos nuestras ansias.

Abrimos el mundo en dos, corte limpio, mojado y luz caliente, que nos invade.